Fui a Londres en junio de 2009 con Amélie y dos otras amigas de lenguas, Emma y Laura. Habíamos reservado en internet billetes para ir a ver la obra de teatro Romeo y Julieta. Como somos todas estudiantes de inglés, era una oportunidad para ver una obra de Shakespeare. Habíamos elegido la representación de las 6 de la tarde porque queríamos aprovechar todo el día para visitar la ciudad. Caminamos todo el día en Notting Hill, a lo largo del Támesis y también fuimos de tiendas. En consecuencia, estábamos muy cansadas al final del día y entonces muy contentas de ir a ver la obra, pensábamos descansar. La representación tenía lugar en el antiguo teatro de Shakespeare The Globe. Por supuesto, está reformado pero siguen dándose las representaciones como antes. Es decir, se dan en el inglés de Shakespeare y hay dos niveles en el público. La gente que está sentada y la que está de pie en el foso. Estábamos en el foso porque los billetes costaban mucho menos. Y ahora sabemos por qué. Está totalmente prohibido sentarse en el foso, había personas de la seguridad que vigilaban. Nosotras estábamos muy cansadas y teníamos un dolor de pies increíble. Luchamos durante más de una hora y media pero no pudimos quedarnos hasta el final. Bueno, sabíamos que los protagonistas morían. Tuvimos dificultad para regresar al hotel, no podíamos caminar sin tener dolores. Al día siguiente, nos podíamos ponernos nuestros zapatos y tuvimos que comprar chanclas. ¡Afortunadamente, hacía sol!
sábado, 1 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
uff, que terrible... me lo puedo imaginar perfectamente porque cuando estuve en Londres el verano pasado también caminé muchísimo y mis pies ya no daban más...
ResponderEliminarCuando vaya a Londres para ver una obra en el Globe trataré de caminar menos ese día...;)