En 2007 fui a Burundi con un grupo de jóvenes. Fue un viaje fabuloso. En una escuela hicimos pequeños juegos con los niños de la escuela. El primer día estaban muy tímidos pero cada día descubrimos más de ellos. Fue fantástico. Los niños tenían cada vez una gran sonrisa maravillosa.
El fin de semana decidimos hacer un pequeño viaje para visitar el país. Decidimos ir a la cascada de Gitega. No hubo problemas durante el viaje. Todos tenían muchas ganas de ver la cascada. Por fin llegamos a la cascada. Pero nos esperaban por algunos bandidos. Nos robaron nuestras cámaras, dinero y teléfonos móviles. Entraron en el autobús y dos hombres se quedaron en el autobús. Pensé que querían ver si teníamos algo más. En mi miedo, les di mi reloj. Pero algunas horas después descubrí que estos dos hombres no eran bandidos sino victimas como nosotros. Así, cuando conté lo que pasaba a los otros, todos se rieron a carcajadas
lunes, 12 de abril de 2010
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Cuando tiempo has pasado en este país? En qué región?
ResponderEliminarEs muy peligroso de viajar a Burundi, cual fue la reacción de los niños?
!Que suerte haber hecho este tipo de viaje! Cambia de todos los viajes turísticos a los cuales, pienso, estamos más acostumbrados.
ResponderEliminar?Pero no tuviste medio? !Porque nos cuentas tu anécdota como si se pasó durante un momento de los más normales!